La final de la Coppa Italia que enfrenta hoy miércoles a Juventus y Nápoles -no sabemos si con o sin "Chucky" Lozano- supondrá la primera entrega de trofeos en el Calcio tras el parón por coronavirus. Y, como en todo el país, las medidas de seguridad en esta ceremonia también serán máximas y nunca vistas. Según informa la Gazzetta, serán los propios jugadores los que deberán desfilar hacia la zona de recogida de medallas y colgárselas en el cuello, ante la ausencia de autoridades.
Una entrega de medallas self-service. "No habrá representantes de las instituciones para rendir homenaje a los ganadores y entregarles el trofeo", dice el medio italiano, que explica que los futbolistas, tras el encuentro, deberán andar por una pasarela que les llevará hacia un escenario preparado donde tendrán dispuestas las medallas para recogerlas.
Sólo se permite una excepción, cuando el capitán recoja la copa de campeón, momento en el que sus compañeros se podrán acercar para celebrar todos juntos el triunfo.
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